En el post anterior hablamos del Síndrome de la Mujer Maravilla: esa capacidad (¿o necesidad ?) de estar en todo, en todos lados, siempre, como si tuvieras súperpoderes para poder con todo a la vez y encima verte espléndida, sin que pase el tiempo.
Viendo eso, no creo que la Mujer Maravilla tuviera tiempo ni necesidad de descansar, pensar en ella, hacer algo que le gustara, decir que No o equilibrar sus roles. ¿Por qué? Porque ES la Mujer Maravilla (un personaje ficticio).
Pero aquí hablamos de y con mujeres reales, que pueden NECESITAR estar en todo, en todos lados y siempre, espléndidas y jóvenes, cumpliendo mandatos y expectativas ajenas, PORQUE CREEN que DEBE ser asi, para ser buenas madres, esposas, trabajadoras.
Y como son mujeres reales, por el contrario NECESITAN (naturalmente) descansar, pensar en ellas, hacer algo que les guste más allá de sus responsabiidades, equilibrar sus roles y vivir en armonía… hasta que se apagan, les gana la ansiedad, la depresión, la frustración o la irritabilidad cuando se postergan porque CREEN que eso no es necesario, no lo merecen o no se lo pueden permitir (claro: deben ser buenas madres, esposas, trabajadoras).
Cuando lo que CREEN no es congruente con lo que NECESITAN naturalmente, generará las emociones negativas y los cuadros de depresión y ansiedad que se encuentra en un elevado porcentaje de mujeres, además de otros síntomas físicos que son los que las hacen “parar” cuando ya no dan más.
¿Te suena familiar?
Por eso caí en la cuenta de que ya que te hablo tanto de bienestar psicológico y de creencias, era importante pensar en la capacidad de AUTOCUIDADO, y en estrategias que te fueran útiles.
Porque… ¿cómo podrías pensar en bienestar si no lográs cuidarte en el día a día?
Es dificil cuidarte y priorizarte si:
- no te valorás y das el tiempo y atención que das a otros.
- no te das el lugar que merecés en la familia, amistades o trabajo, como Vos y no como tu rol.
- no te detenés simplemente, para pensar en cómo te sentís y qué necesitás.
- CREÉS QUE SOS LA MUJER MARAVILLA!
Es importante el equilibrio en la vida (y no sólo porque soy de Libra ;)) ya sea entre tus roles, en el uso de tu tiempo, en la energía que ponés a tus compromisos, en tus relaciones y responsabilidades. Seguramente ya has experimentado las consecuencias de volcarte mucho hacia algún aspecto y descuidar otros, por mucho tiempo.
Cuidado: a veces el equilibrio PRECISAMENTE requiere hacer eso, durante algún período por circunstancias especiales: si tenés un bebé, un familiar enfermo, períodos de exámenes o cambios importantes.
El llamado de atención surge cuando algo que debería ser temporal se hace crónico, o algo que podría compartirse lo asumís sola, o te hacés cargo de lo que no te corresponde por no poner límites, desbalanceando tu vida y afectando tu bienestar.
Diversos estudios sobre los efectos de la doble presencia trabajo-familia en las mujeres, han encontrado estas consecuencias que pueden resultarte conocidas:
- Falta de tiempo personal.
- Sensación de culpa al priorizarse.
- Estrés y agotamiento crónico.
- Más síntomas físicos, ansiedad y depresión
- Menos tiempo dedicado a la familia o menor productividad laboral (según la interferencia)
Y estas son estrategias sugeridas para lograr equilibrar áreas en tu vida, priorizarte, tener más espacios y tiempos para vos, que redunden luego en tu bienestar y los de quienes te rodean:

NOTA: todas se pueden aprender y desarrollar. Y todas, pueden estar limitadas por tus creencias y los permisos que te das.
Ahora, te invito a pensar: ¿Cuáles de ellas ponés en práctica y en cuántas dirás “no tengo tiempo” o lo has intentado y no te ha resultado tan fácil como se lee, o no las ves viables o valiosas, directamente?
SIEMPRE hay posibilidades de tener un tiempo para vos: aunque sea para respirar y volver a centrarte, no te pido más.
Muchas veces, lo que en realidad hay que atender primero es a lo que creemos respecto a lo que hacemos. Te llamaría la atención saber cuántas veces somos nosotras mismas las que generamos las condiciones que nos afectan negativamente…
¿Qué tal si empezás por revisar tus creencias respecto a vos, tus tiempos, y tus prioridades?
¿Y si empezaras a cambiar tus diálogos internos y hacer ejercicios para conectar contigo y darte permisos?
En el Universo Eureka estamos trabajando para darte recursos y dejarte cada vez con menos excusas 😉 ¿ya lo exploraste? te invito!.
Lorena



